QUÉ SEA UN BULO, QUÉ SEA UN BULO, QUÉ SEA UN BULO...

Tarantino es uno de mis grandes ídolos cinematográficos, es el Icono de la Gran Producción, es el Padre de las Grandes Ideas, el Maestro de la Utilización de los Recursos que vomita en todos sus proyectos y que sólo él es capaz de dominar de manera tan magistral y todo bien mezcladito (humor negro y sangre, acción y sexo, reflexión y crítica hacia la ortodoxia más puritana yanqui); aquí, como buena iconoclasta, hasta diría: "Tarantino es mi dios, y yo su profeta", pero... hasta la excentricidad que siempre le ha caracterizado y que nunca nos ha defraudado tiene un límite, y es que, si es verdad el rumor que circula acerca de su nuevo trabajo -un remake de la cinta de 1965 "Faster, Pussycat, Kill!, Kill!" de Russ Meyer-, Britney Spears sería la elegida para ostentar uno de los papeles protagonistas:

Varla, bailarina go-go y tras una noche de duro trabajo junto a otras dos compañeras de curro, decide salir a quemar el resto de la noche haciendo el gamberro como siempre. En mitad del desierto se topan con el coche de una joven pareja a la que retan a una carrera con consecuencias fatales: el novio chulo muere a manos de Varla, y su chica teniendo tórridas escenas de cama con la bailarina. Para colmo, en su trayecto se topan con una gasolinera donde, el dueño con pintas de "americanito profundo" les cuenta que, en algún lugar de ese desierto, vive un hombre con dos hijos escondidos y una gran fortuna... ¿Qué estarán dispuestas a hacer estas cuatro para conseguir su propósito?.

Todo el mundo merece una oportunidad, y tres, y cuatro... para recuperar las riendas de su vida pero también hay cientos de artistazas que podrían bordar este papel protagonista sin el miedo a ver una de las producciones de Quentin en la balda de Género Z en lo videoclubs de todo el mundo, sin el miedo a ver que pasa sin pena y sin gloria en las carteleras, y sin miedo a que el único eco que perdure en el tiempo sea la concesión a Spears de un segundo premio Razzie por Peor Actriz.