miércoles, 6 de junio de 2007

POR EL DIA MUNDIAL DEL MEDIO AMBIENTE



Ayer, día 5 de mayo se celebraba el aniversario de nuestro medio ambiente pero, cada año de una manera más marcada, se celebra este día como los aniversarios de la muerte de nuestros seres más queridos. Debería ser éste, un día de júbilo y de más respeto, si cabe, a nuestra más preciada (y única, y en la que habitamos, recuerdo y por muy absurdo que parezca hacerlo) madre tierra; pero, muy lejos de ésto, se nos plantea como un día de remordimientos para aquellos que tenemos un mínimo conciencia... pero ¡no nos engañemos!: esa sensación de pseudo-compromiso, que la mayoría hemos adquirido más tarde que temprano, no es suficiente. Claro está que se está haciendo mucho, mucho por remover conciencias y por fomentar un uso adecuado de las energías y mucho por poner en marcha planteamientos ecológicos que frenen este virus mortal que afecta a nuestro Globo desde hace ya generaciones; aún así, nos sigue quedando la gran asignatura pendiente: tomárnoslo de una manera más sería, si cabe y, ésta, de una manera más tajante.

Esto ya no es el capricho de unos pocos catastrofistas sino que es la obligación de todos si queremos seguir viviendo en unas mínimas condiciones: por ti, por mí, por los que nos rodean, por todos los que habitamos aqui... y por los que tienen que llegar.

MADRE TIERRA, PERDÓNANOS SI ES QUE PUEDES.

No hay comentarios: